Antes de participar en una partida de póquer, es una buena idea comprender no sólo las reglas fundamentales, sino también el lenguaje básico utilizado por los jugadores antes, durante y después de la partida.
Variaciones del juego de póquer
Hay cientos de tipos distintos de juegos de póquer, cada uno con su propio conjunto de reglas y, por supuesto, su propio nombre. He aquí algunas de las más comunes:
El Texas Hold’em es uno de los tipos de póquer más populares, con reglas sencillas. Al comienzo de la partida, se reparten dos cartas boca abajo a cada jugador, seguidas de la apertura de cinco cartas comunes. Para ganar, hay que conseguir la mayor combinación de cinco cartas.
El Omaha Hold’em está disponible en una gran variedad de formas. Sin embargo, las reglas de la mayoría de ellas son muy similares: cuatro cartas para cada jugador al principio, con cinco cartas comunes descubiertas. Para ganar, tomas dos cartas de tu mano y las combinas con tres cartas comunes.
La jerga más importante del póquer
La acción puede referirse al turno de un jugador o a la cantidad de apuestas en el bote.
Ante – una cantidad mínima de acción necesaria que se elige al comienzo de la mesa.
All-In – colocar una apuesta con todas sus fichas;
Quemar – descartar la carta superior boca abajo;
Una llamada es una apuesta que equivale a la apuesta anterior.
Cuando se realiza una apuesta sin retirarse, se denomina pasar.
Cartas comunitarias: el crupier abre estas cartas en el centro de la mesa. También se conoce como “board”.
El flop son las tres primeras cartas del tablero. La cuarta se denomina “bend” y la última “river”.
Retirarse significa perder las apuestas y renunciar a todas las cartas de la mano.